La COVID-19 se ha extendido de manera desigual en todo el mundo: algunos países y regiones han logrado contener las infecciones, mientras que otros se enfrentan a una emergencia masiva de salud pública. A medida que la transmisión en la comunidad y las repercusiones socioeconómicas continúan, la pandemia está agravando las vulnerabilidades existentes, creando nuevas necesidades humanitarias y exacerbando las actuales. El virus se ha comportado a menudo de manera impredecible, pero no hay duda de que seguirá teniendo repercusiones en 2021. Las respuestas adaptables serán esenciales en el futuro.
En marzo de 2020, el Secretario General de las Naciones Unidas lanzó el Plan Global de Respuesta Humanitaria para la COVID-19 (GHRP por sus siglas en inglés). Se estableció para responder a tres prioridades estratégicas:
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Contener la propagación del virus y disminuir la morbimortalidad.
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Reducir el deterioro de los bienes y derechos humanos, la cohesión social, la seguridad alimentaria y los medios de vida.
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Proteger, ayudar y defender a los refugiados, los desplazados internos, los migrantes y las comunidades de acogida especialmente vulnerables al virus.
El GHRP se centró estrictamente en las necesidades humanitarias adicionales inmediatas causadas por la pandemia y las respuestas a corto plazo conexas. La versión original, publicada en marzo, se preparó como un plan de tres meses centrado en los organismos, en el que se solicitaban 2.000 millones de dólares. A medida que la crisis fue evolucionando, el GHRP se sometió a dos revisiones en mayo y julio, transformándose de un plan promovido por los organismos a un plan enfocado en los países, en el que se mostraban las necesidades y las prioridades de respuesta sobre el terreno.
Al 25 de noviembre de 2020, el GHRP había solicitado 9.500 millones de dólares, lo que contribuyó a crear la mayor solicitud de fondos jamás realizada por el Panorama Global Humanitario (GHO). El GHRP ha logrado llamar la atención sobre los efectos sanitarios y no sanitarios de la pandemia. En particular, ha renovado el sentido de urgencia para abordar problemas de VG frente al aumento de la violencia; se ha centrado en la relación entre la pérdida de medios de vida, el aumento de la inseguridad alimentaria y las necesidades humanitarias; y ha ayudado a superar las restricciones a la movilidad mundial mediante servicios aéreos humanitarios para la carga y el personal, entre otros éxitos .
La programación humanitaria se está ajustando para tratar la COVID-19 de una manera más integrada, a medida que los efectos sanitarios y no sanitarios de la pandemia se funden con los impactos de otras crisis y tensiones. Como resultado, para 2021, los análisis y respuestas de la COVID-19 se han incorporado a los HNO y PRH "regulares", así como a los planes de respuesta interinstitucionales.
Los equipos humanitarios de los países han hecho mucho para preparar sus HNO y PRH para 2021 a través de esta óptica de integración. En la mayoría de los casos, los impactos sanitarios y socioeconómicos de la pandemia se superpondrán a otros riesgos de salud, nutrición, seguridad alimentaria, medios de vida, educación y protección a los que se enfrentan los diferentes grupos de población. Por lo tanto, aunque algunas respuestas específicas a la pandemia pueden seguir siendo necesarias en determinados contextos, en la mayoría de los casos la COVID-19 representará uno de los factores de las diversas necesidades humanitarias, y la programación reflejará los efectos combinados con otras crisis. Los equipos en los países también alinearán la respuesta humanitaria con otras respuestas en curso o previstas para la COVID-19 a fin de evitar la duplicación e identificar las áreas y grupos para los que las respuestas de desarrollo son más apropiadas.
Como resultado de esta integración, el GHRP concluirá el 31 de diciembre de 2020, según lo previsto. En el futuro, las respuestas humanitarias de COVID-19 y las que no lo son se reflejan conjuntamente en este GHO 2021. Esta integración también marcará la sincronización de las necesidades de financiamiento de la COVID-19 y no COVID-19 y de la presentación de informes en el marco del ciclo del programa humanitario regular.
Esta incorporación también sirve para los aspectos geográficos y analíticos. El GHRP abarcaba 63 países. Se consideró la posibilidad de incluir automáticamente en el GHO 20201 a países y planes regionales interinstitucionales que ya figuraban en él (a menos que los directores humanitarios de los países o los organismos principales de los planes regionales solicitaran su eliminación.
Esta incorporación también sirve para los aspectos geográficos y analíticos. El GHRP abarcaba 63 países. Se consideró la posibilidad de incluir automáticamente en el GHO 20201 a países y planes regionales interinstitucionales que ya figuraban en él (a menos que los directores humanitarios de los países o los organismos principales de los planes regionales solicitaran su eliminación.
Se consultó a los países que no contaban con planes de acción humanitaria para determinar cuáles seguirían necesitando asistencia humanitaria y deberían pasar del GHRP al GHO 2021. Las deliberaciones se basaron en los siguientes criterios clave:
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¿Es probable que las necesidades humanitarias continúen o empeoren en 2021?
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¿Existen otros marcos mejor posicionados para cubrir estas necesidades, por ejemplo, los planes socioeconómicos?
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El gobierno anfitrión apoya un plan humanitario independiente?
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¿Puede el equipo en el país elaborar un HNO/PRH?
Sobre la base de estos criterios, y a petición o con el acuerdo de los dirigentes humanitarios en el terreno, se recomendó a los países que se incluyeran en el GHO 2021. El ERC (Coordinador del socorro de emergencia) y los Directores de Emergencia del IASC aprobaron posteriormente la transición de tres países del GHRP al GHO 2021: Mozambique, Pakistán y Zimbabwe, además del Plan Regional de Migración para el Cuerno de África y Yemen. Los planes humanitarios para la COVID-19 en otros países que no forman parte del GHRP concluirán el 30 de diciembre de 2020 o se integrarán en otros planes o marcos de desarrollo.
El GHO 2021 incluye los siguientes planes específicos para cada país: Afganistán, Burundi, Burkina Faso, Camerún, Chad, Colombia, Etiopía, Haití, Iraq, Libia, Malí, Myanmar, Mozambique (nuevo), Niger, Nigeria, República Centroafricana, República Democrática del Congo (RDC), Territorios palestinos ocupados, Pakistán (nuevo), Somalia, Sudán del Sur, Siria, Sudán, Ucrania, Venezuela, Yemen y Zimbabwe (nuevo).
El GHO 2021 incluye también los siguientes planes interinstitucionales regionales: Plan de respuesta regional para los refugiados de Burundi, Plan de respuesta regional para los refugiados de la República Democrática del Congo, Plan de respuesta regional para los refugiados del Sudán del Sur, Plan regional para los refugiados y la capacidad de recuperación de Siria (Siria 3RP), Plan de respuesta conjunta para Rohingya, Plan de respuesta regional para los refugiados y los migrantes de Venezuela y Plan regional para los migrantes del Cuerno de África y Yemen (nuevo). El GHO incluye 56 países en total.
Más información
Notas
- Para las cifras más actualizadas, consulte el Servicio de Seguimiento Financiero.
- 2. Para obtener información más detallada sobre el progreso del GHRP, consulte la iteración de julio del GHRP, así como los informes de progreso (abril, agosto, septiembre, noviembre). Se ha previsto un informe final de progreso para enero de 2021.
- Para obtener más información sobre estos conceptos y orientación práctica sobre cómo incorporar la COVID-19 en el análisis de las necesidades humanitarias y la planificación de la respuesta, véase el HPC Step by Step Guide y la guía del Marco de análisis intersectorial conjunto (Joint Intersectoral Analysis Framework), así como la sección 3 del presente informe.
- Véase Llamamientos coordinados entre agencias: Resultados de 2020 para obtener detalles sobre los países incluidos en el GHO 2020.