En el último decenio se ha registrado un aumento constante de los brotes de enfermedades, con un crecimiento anual medio del 6,9%. En los últimos cinco años, el 94% de los países en los que se han hecho llamamientos humanitarios interinstitucionales han registrado por lo menos un brote epidémico.
A nivel mundial, más de 5 millones de niños menores de 5 años se enfrentan a las amenazas del cólera y la diarrea acuosa aguda. La OMS, UNICEF y Gavi y la Alianza para la Vacunación informaron de que, para agosto de 2020, los servicios de inmunización sistemática se habían interrumpido en al menos 68 países debido a la pandemia de la COVID-19, con lo que aproximadamente 80 millones de niños menores de 1 año corrían un mayor riesgo de contraer enfermedades evitables mediante vacunación.
Casos y muertes por COVID-19 por país
La COVID-19 ha obstaculizado los servicios esenciales de salud en casi todos los países (90%), y el mayor impacto se ha sentido en los países de ingresos bajos y medios. El diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades no transmisibles se han visto interrumpidos en un 69%, la planificación familiar y la anticoncepción en un 68%, la atención prenatal en un 56% y el diagnóstico y el tratamiento del cáncer en un 55%. El tratamiento de la salud mental ha sufrido una interrupción del 61% (véase la sección sobre salud mental en situaciones de emergencia). En cuanto a las enfermedades transmisibles, las alteraciones de la atención de la salud causadas por la pandemia están revirtiendo los avances logrados con tanto esfuerzo en la lucha contra el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), la tuberculosis (TB) y la malaria. Los análisis de la OMS, ONUSIDA, la Alianza Alto a la Tuberculosis y otros sugieren que el número anual de muertes por VIH, tuberculosis y la malaria podría casi duplicarse debido a la COVID-19, arrasando con hasta 20 años de progreso.
Garantizar el acceso equitativo a una vacuna COVID-19
La pandemia ha demostrado cómo las enfermedades pueden provocar necesidades humanitarias, agudizando la atención sobre las desigualdades estructurales y sociales existentes. Los grupos de ingresos más bajos suelen enfrentarse a tasas más elevadas de enfermedades crónicas, como la diabetes o las cardiopatías, y es probable que padezcan afecciones subyacentes como diarrea, gastroenteritis, malaria y tuberculosis.
Más información
Source: OCHA
Source: WHO
Notas
- [Elsevier, Global Research Trends in Infectious Disease, Marzo de 2020.
- [Según lo determinado por el Observatorio de la Salud Mundial de la OMS - Datos sobre emergencias sanitarias de 2015 a 2019.
- UNICEF, Nota de prensa: Over 5 Million Children Face the Threat of Cholera and Acute Watery Diarrhea in the Midst of COVID-19 as Yemen Gets Heavy Rains, Abril de 2020.
- UNICEF, Immunization coverage estimates data visualization, Julio de 2020 y OCHA, Global Humanitarian Response Plan, Julio de 2020
- OMS, Pulse survey on continuity of essential health services during the COVID-19 pandemic: interim report, 27 de Agosto de 2020
- OMS, Pulse survey on continuity of essential health services during the COVID-19 pandemic: interim report, 27 de Agosto de 2020
- Fondo Global Mitigating the Impact of COVID-19 on Countries Affected by HIV, Tuberculosis, and Malaria, Junio de 2020.
- IASC, Key Messages on the COVID-19 Response: Applying the IASC Guidelines on Inclusion of Persons with Disabilities in Humanitarian Action, Junio de 2020
- UN-Habitat, Fighting COVID-19 in Africa’s Informal Settlements, 8 de junio de 2020.